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Comer y dormir en Paralelo 40/ I
 Actualmente, la gastronomía tradicional se ha convertido en un importante recurso turístico capaz de atraer al turista interesado en satisfacer su paladar. Junto con la mera estancia vacacional se demanda cada vez más conocer de manera profunda la zona elegida como destino turístico; sus parajes, monumentos, actividades, todos los recursos que lo hacen atractivo y diferente, y entre ellos, por supuesto, se encuentra la gastronomía. El destino turístico ya no es entendido como un mero sitio de descanso o incluso de paso, sino que llega a convertirse en un lugar del que puede aprender mucho e incluso llegar a forma parte del mismo de manera activa.
Esta certeza y la creciente oferta de alojamientos hace que los empresarios del sector se planteen interesantes posibilidades que atraigan la demanda hacia su establecimiento. Una de estas opciones es incluir, junto a la estancia, más servicios que contribuyan a garantizar una estancia de calidad para el turista. Son muchas las casas rurales que participan de esta nueva filosofía y ofertan, además de un amplio abanico de actividades que permiten al turista conocer y disfrutar el destino seleccionado, la posibilidad de degustar platos elaborados al más puro estilo tradicional.
En Paralelo 40 encontramos casas rurales que incluyen servicio completo de restauración y otras que los realizan a petición del turista, ya sea a través de un comedor situado en sus instalaciones ya mediante un servicio concertado con determinados restaurantes de la zona.
En este boletín nos centraremos en las comarcas levantinas que integran la red, comenzando por la comarca del Macizo del Caroig, en la provincia de Valencia. Allí podemos disfrutar de servicio de restauración y alojamiento en Casa Rural del Castillo y en Casa Rural El Pincho donde además podremos deleitarnos con los paisajes naturales ofrecidos por esta sierra. La oferta se completa en tierras alicantinas (Aitana) con El Casalot de Benifato, una casa construida en piedra, recientemente restaurada, donde se pueden encargar comidas caseras, y Casa Gallinera, donde el turista podrá hospedarse en una construcción de finales del XVIII. En Casa Rural-Restaurante Macchu Picchu al placer de la gastronomía se une el de poder contemplar pinturas rupestres (declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO). Por último, terminaremos este primer recorrido por los diversos alojamientos con servicio de restauración en el Noroeste murciano. Podemos elegir entre Casas del Conde, una vivienda de más de 200 años de antigüedad, los tres alojamientos pertenecientes a La Caraba -El Refugio La Caraba, La Acequia La Caraba y La Casica La Caraba-, Ecoespuña, Turismo Rural, casa de labranza de 1850, Alojamientos Rurales La Fragua y Santa Bárbara, creadas a partir de la rehabilitación de dos casas antiguas y donde se realizan comidas por encargo; y, finalmente, Villa Calar, donde se pueden degustar comidas típicas de la zona hechas de forma casera.
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