Situado en la carretera Bolbaite-Navarrés, se trata de un antiguo molino convertido en un precioso restaurante.
Su especialidad son las carnes a la piedra, las carnes de caza, los pescados y mariscos frescos, todo esto acompañado de suculentas salsas. Una cocina de autor unida a una cocina autóctona, como los gazpachos del Caroig, elaborados con carne de caza.
Dispone de menús diarios y menú degustación los fines de semana y festivos. Cuenta con 14 mesas y un total de 60 plazas.
El restaurante cierra los lunes.